El ortosifón o “té de Java” es originario del Asia tropical, concretamente de Malasia e Indonesia. Sus originales flores azul violáceo poseen unos estambres muy largos, por lo que también se le conoce como bigotes de gato.
En India e Indonesia se utiliza desde hace siglos para tratar las enfermedades renales y de la vesícula. Fue a finales del siglo XIX cuando el mundo occidental empezó a interesarse realmente por esta exótica planta medicinal y cuando se descubrieron sus extraordinarias propiedades como drenante general del organismo.
En fitoterapia se utilizan sus hojas por su riqueza en flavonoides, polifenoles, aceites esenciales y potasio. Es un importante diurético, indicado como ayuda en regímenes de control de peso. Aumenta la eliminación renal de los líquidos, la urea y el ácido úrico. Debido a su acción drenante, favorece la eliminación de arenillas renales. Asimismo, está indicado para prevenir las recaídas de cólicos nefríticos